Análisis táctico: Real Madrid 3 Real Sociedad 1

El Real Madrid sumó tres nuevos puntos en La Liga ante la Real Sociedad para mantenerse en el coliderato con el Barcelona -los azulgranas ganaron 1-2 al Leganés a domicilio- empatados a 28 puntos. Una victoria que llegó después de sobreponerse al gol de Willian José en el minuto 2 de partido en un error de Sergio Ramos en la zaga blanca.

Los visitantes mandaron en el partido en la primera media hora, donde acumularon alguna ocasión más para hacer más grande la distancia. La reacción del Real Madrid llegaría a través de Karim Benzema a la media hora, rematando con el hombro un centro de Luka Modric en una acción a balón parado.

El gol blanco cambió la dinámica del partido, pasando desde entonces los de Zinedine Zidane a dominar el juego y las acciones ofensivas. En la segunda mitad llegarían los siguientes goles: Federico Valverde, después de que el balón tocara en un defensa de la Real, y Modric de volea aprovechando una gran asistencia de Benzema, otra vez con el pecho.

Alineaciones iniciales

Real Madrid

Real Sociedad

 



El Real Madrid afrontaba una de las visitas que se preveían más incómodas de la temporada en su feudo, ya que la Real Sociedad viene siendo uno de los equipos más coordinados tácticamente y efectivos en los patrones que repite.

Batalla en el mediocampo:

El equipo dirigido por Zinedine Zidane se situó de inicio con su habitual 4-3-3 (abajo). Apostó por un centro del campo de mucho trabajo para ganar la batalla a la Real Sociedad en esa parcela, donde se esperaban muchos duelos individuales, colocando a Casemiro como pivote por delante de la defensa y Valverde un poco por delante sin coincidir en altura con Modric, quien tuvo mayor libertad de movimientos.



La Real Sociedad modificó ligeramente su dibujo, mostrando que los sistemas de juego son organizaciones estructurales y por encima están los comportamientos. Se desarrolló en un 4-3-3 en su fase ofensiva en la que Odegaard por momentos actuó de media punta y los hombres de banda fueron Portu y Oyarzabal, que normalmente parten desde una posición más cerrada. Ambos se mantuvieron amplios durante buena parte del partido para bloquear y preocupar a los laterales del Real Madrid en sus avances.

Presión efectiva para el 0-1:

La Real Sociedad realizó una presión alta agresiva y valiente y decidieron utilizar una máxima del fútbol en el concepto de presión, orientar la misma hacia el central jugando a pierna cambiada. En este caso Sergio Ramos es central diestro jugando en perfil izquierdo, además es un defensor que asume riesgos habitualmente, lo que puede dar lugar a error.



Fue en la primera presión a la fase de inicio del Madrid donde se vio ya una basculación intensiva tras orientar la presión hacia Ramos (arriba). Ahí Odegaard tapó sus líneas de pase y se activó todo el sistema de presión de la Real: Oyarzabal, que era el extremo alejado, tapaba pase interior con Modric, Mikel Merino se fue tras Casemiro y Zubeldia fijó a Hazard, que había venido en apoyo mandando a Valverde fuera de la zona de recepción.

Con todo esto montado, y el acoso de Odegaard sobre  Ramos, tan solo quedaba que el delantero centro tapara el pase de vuelta atrás con el portero, liberando en el lado débil a Varane, Carvajal y Rodrygo, ya que bajo presión ese cambio de orientación es una opción de gran dificultad y generando así superioridad en el lado fuerte.

Y fue en esa primera presión donde la Real Sociedad encontró el gol. Un mal pase sin mirar de Ramos a Courtois, que le había dado un apoyo perfilado fuera de la portería abriendo línea de pase, fue cazado por Willian José para interceptar el pase y hacer gol.

Estirar al rival:

A pesar de la desventaja, el Real Madrid siguió intentando realizar ataque combinativo desde inicio, pero fue la buena presión de los visitantes lo que obligó, con el equipo demasiado estirado (abajo), a tener que jugar en múltiples ocasiones en directo sin un objetivo claro. En esas situaciones la Real Sociedad era superior tanto en la disputa como en la segunda jugada, momento en el que empezaba a elaborar para realizar su ataque en pocos contactos.



Y es que la Real Sociedad es un equipo que, encontrando similitudes con el mejor Liverpool, le gusta atacar rápido y llegado el momento meter a los extremos entre central y lateral para alcanzar la portería contraria en pocos toques y estirando al equipo rival. También se encuentra cómodo robando en campo contrario y con posesiones cortas, pero no exentas de juego combinativo para encontrar la finalización rápida. Jugadores como Odegaard y Mikel Merino, que deciden jugar de manera muy vertical y encontrar esos pases filtrados (abajo) entre líneas donde Oyarzabal aparece bien y pueden lanzar a Portu en velocidad.



Asimimo, encontramos que se escalonan a la perfección y equilibran un equipo que se intuye largo por todas las situaciones ya comentadas. Es Zubeldia el que llega hasta meterse entre centrales en fase de inicio cuando la presión es con dos puntas y acompaña la jugada por detrás del balón hasta que pasa a fase de finalización, donde realiza su vigilancia ofensiva.

En este caso era sobre Modric, siempre atento a la posible pérdida. Merino abarca desde la fase de creación hasta ocupar posiciones de frontal del área para posible finalización y Odegaard, que cubre toda la fase de creación y finalización, no coincidiendo prácticamente nunca en altura (abajo).



En fase defensiva y durante la fase de creación del Madrid, la Real Sociedad montó en bloque medio un 4-4-2 (abajo) liberando a Odegaard de trabajo y evitando que el equipo local jugara por dentro, aunque no era la situación donde la Real estaba más cómoda.



En fase defensiva, el Real Madrid adoptó su ya clásico 4-1-4-1 (abajo), con Casemiro entre las dos líneas de 4 dando consistencia a la zona interior cuando pudo contener el contraataque rápido y adoptar posiciones de repliegue, donde se encontró bastante cómodo.



Decae la Real; crece el Madrid:

Los equipos que presionan en un campo como el Santiago Bernabéu corren el riesgo de empezar a caer físicamente después de la media hora y empiecen a aparecer los intervalos para poder combinar con el medio. Y ahí es donde el Real Madrid empezó a hacer daño, ante un equipo defensivo largo y una presión que no llegaba a su objetivo permitiendo muchos espacios interiores.



En estas situaciones Modric (arriba) se desenvuelve a la perfección, con espacios por dentro volvió a ser el Balón de Oro que todos conocemos, recibiendo el balón a la espalda de Merino fue imparable. La Real paró los ataques con faltas, que en ocasiones eran centros laterales peligrosos. Así, por ejemplo, llegó el primer gol del Madrid.



A partir de aquí los de Zidane se hicieron con el partido en el centro del campo y Modric, acompañado por Fede y Casemiro, jugó a su antojo y asistió también en el 2-1 e hizo el tercero con un precioso disparo con la izquierda.



"No empezamos bien con el balón, estuvimos muy lentos. Luego ya, el final de la primera parte fue muy bueno y el inicio de la segunda también. Estamos contentos porque enfrente había un muy buen equipo", resumió Zidane sobre el partido. El técnico del Real Madrid también habló sobre la situación de Gareth Bale en el equipo después de los pitos de la afición: "Han pitado a los mejores jugadores y Bale ha entrado bien en el partido. Lo que hay que hacer es seguir trabajando en el campo".



"Hemos profundizado más por la derecha, es verdad, que quizás lo ha provocado el Real Madrid. Estoy contento con la primera parte, creo que merecimos más, aunque ellos tuvieron ocho minutos muy buenos. El Madrid ha estado mejor en esa faceta de ataque", analizó Imanol. El técnico de la Real Sociedad también se detuvo en Odegaard, jugador cedido por el equipo blanco a la Real: "Le ha faltado ese último pase, ese último disparo... Normalmente en el remate está más atinado, pero no creo que haya estado superado, sino porque enfrente había un equipo muy poderoso".

Redacción: Héctor García